Tras 72 horas de extinguido el incendio en uno de los dos tanques de petróleo crudo cubano que alimenta a la central térmica Antonio Guiteras de Matanzas, la unidad se mantiene estable en 260 MW.
En conversación con el ingeniero Román Pérez Castañeda, subdirector técnico, se conoció que en este momento el bloque no ofrece amenazas que impidan continuar la generación.
Interrogado sobre el destino del tanque siniestrado, Pérez Castañeda narró que en cumplimiento del protocolo establecido y tras ser declarado extinguido el incendio, se mantuvo en enfriamiento hasta el siguiente día, bajo vigilancia de un comando de bomberos.
Precisó el especialista que el tanque averiado necesita reparación sobre todo en su techo, deformado por el calor, y en ese sentido se procede a drenar el agua que recibió, para luego trasvasar los diez mil metros cúbicos de petróleo hacia otro depósito.
Tras estas operaciones, intervendrán efectivos de una brigada especializada en la construcción de tanques, quienes asumirán la defectación y posterior restauración del depósito.
Por el momento, la central térmica yumurina labora con otro tanque similar al incendiado, que se alimenta desde la base de supertanqueros de Matanzas tarea que demanda precisión en parámetros de calidad, al no contar con el prudente «reposo» en el bloque yumurino.
Lo tranquilizador -explica el ingeniero Román Pérez Castañeda- es que en otras oportunidades se ha operado bajo condiciones similares, sin mayores inconvenientes.
(Tomado de CubaDebate)
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